San Sebastián
San Sebastián Mártir es el Patrón de Alhaurín el Grande y el Santo bajo cuya advocación se encuentra la Ermita en la que tiene su sede la Real Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno. Asimismo, es otro de nuestros Sagrados Titulares.
Del fuerte arraigo y la importancia que esta devoción ha tenido en nuestra historia nos da idea que el nombre del Santo se encuentre en la calle más antigua, céntrica y señera de Alhaurín el Grande, que desde tiempo inmemorial ha sido siempre denominada Calle de San Sebastián, al igual que la explanada que se encuentra delante de la ermita es llamada, también, Plazoleta de San Sebastián.
El origen de su devoción se encuentra en la toma de localidad por los Reyes Católicos en 1485. Tras ocho siglos de presencia andalusí, la Reconquista trajo consigo la llegada a Alhaurín el Grande de gentes procedentes de Extremadura, el Valle del Guadalquivir, Castilla e incluso Portugal. La antigua mezquita mayor fue transformada en Iglesia y puesta bajo la advocación de Nuestra Señora de la Encarnación mientras que, al mismo tiempo, en una colina situada entonces en las afueras de la población se habilitó un edificio, ya existente en época musulmana, como Ermita bajo la advocación de San Sebastián. Estos fueron templo fue entronizada una imagen del Santo procedente de las tallas y ornamentos litúrgicos con las que los Reyes Católicos dotaban a las poblaciones reconquistadas. Los primeros datos de la capilla datan de 1492. En los célebres Repartimientos del Bachiller Serrano, efectuados aquel año se menciona como entre los bienes que habían correspondido al caballero Diego García de Hinestrosa, regidor de la ciudad de Málaga y fundador del Hospital de Santo Tomás se hallaban.
“çinco arançadas de huertas en ciertos pedaços que alindan con el molino de açeite del dicho Diego Garçia, e de la otra parte con el ermita de San Sebastian”
El hecho de que los Reyes Católicos sintiesen especial devoción por el Mártir hizo que su culto prendiese con mucha fuerza en los territorios recién conquistados. A esto debemos añadirle que San Sebastián fue también tomado, también, como abogado ante las epidemias, al que se acudía frecuentemente en rogativa cuando aparecían la peste y otros contagios. Fueron estos hechos los que motivaron que, tal y como atestigua la tradición oral, y al igual que en las cercanas Coín y Alhaurín de la Torre, San Sebastián fuera nombrado Patrón.
Un nombramiento que queda refrendado de forma definitiva en 1584 cuando, estando la localidad bajo la jurisdicción de Málaga, el consistorio y el cabildo catedralíceo lo reconocen como Patrono de Málaga y de su tierra, haciendo el 18 de enero de aquel año el Solemne Voto de guardar su fiesta en la ciudad y en las villas y lugares que, como Alhaurín el Grande, formaban entonces parte su término. Un hecho que formalizaba y hacía efectivo el Patronazgo de San Sebastián sobre nuestro pueblo.
Junto a la Ermita de San Sebastián aparecerá pronto una Hermandad bajo la advocación de San Sebastián, cuyo nacimiento se producirá entre finales del siglo XV y el primer cuarto del siglo XVI. Este será el tronco que se convertirá, con el paso del tiempo, en la actual Real Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno.
Son numerosos los datos que tenemos acerca de la misma, como por ejemplo el testamento de Francisco Serrano, fechado el 4 de octubre de 1590, en el que este vecino pide que en su entierro le acompañen “los beneficiados cura y sacristan y los demas clerigos que se hallen (…) y la sera desansebastian”. El testamento del Beneficiado de la Iglesia Parroquial Andrés Hurtado, otorgado en 1640 manda oficiar a su muerte seis misas por su alma “aelmartir sansebastian, y paguese”.
Con respecto a la celebración, que se festejará durante estos siglos de manera continuada, sabemos gracias a la Dotación de mandas testamentarias para fiesta, que entre 1764 y 1830 la Real Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno celebraba, aún, junto a las Festividades del Dulce Nombre de Jesús y “Honras a Nuestro Padre Jesús Nazareno”, la de San Sebastián.
Destruida durante la Guerra Civil la primitiva imagen, de autor desconocido, la Hermandad adquiere una nueva talla en 1947. No obstante, habrá que esperar hasta 1981, para que durante el mandato del Hermano Mayor Baltasar Ruíz Gallego se retome la celebración, que desde entonces va creciendo en auge y participación. En 1985, siendo Hermano Mayor Bernardo Manzanares, San Sebastián es trasladado a la Casa-Hermandad de calle Nueva con motivo de su inauguración. En 2002 San Sebastián estrena un nuevo y elegante trono, en madera tallada, sufragado por el Excmº. Aytº. de la localidad, en atención a ser el Patrón del pueblo. En 2009, la procesión pasa a celebrarse en domingo. En 2010, se conmemora el DXXV Aniversario del culto a San Sebastián en Alhaurín el Grande con numerosos actos, entre ellos la presentación de una reliquia del Mártir que con el visto bueno de la Parroquia y de la Diócesis fue apadrinada por nuestro inolvidable Consejero D. Sebastián Gómez García, culminando las gestiones que la Hermandad había llevado a cabo desde 2006. También estrenó la Hermandad, en junio de este año, un Estandarte del Patrón realizado por el Taller de Bordado de la Hermandad.
2017 presenta grandes novedades. San Sebastián estrena Dosel de Cultos y Paño de Pureza, recibiendo nuestra Hermandad y el pueblo de Alhaurín el Grande la bendición especial de Monseñor Munilla, Obispo de San Sebastián, en atención a que el mismo Patronazgo une Alhaurín el Grande y la capital donostiarra. Por el mismo motivo, en 2018 también recibimos la bendición episcopal del Excmoº. y Rvdmº. Sr. Cardenal Orani Tempesta, Arzobispo de Río de Janeiro, ciudad también bajo el patronazgo de San Sebastián.
En estos últimos años la procesión ha ganado en participación y vistosidad, estrenando un tramo de hermanos provistos de elegantes cirios, cuerpo de acólitos y pertiguera y nueva ubicación para la Banda de Música, que cambiará su ubicación marchando tras el trono, y no delante. El desfile vuelve, también, a celebrarse en el domingo más cercano al 20 de enero, recuperándose para ese día la exposición al culto público de la talla y la reliquia del Patrón, a la que se le añade una ofrenda floral.
En la actualidad, la más antigua de las procesiones alhaurinas se celebra el domingo más cercano a su Festividad. El Patrón recorre el trayecto entre la Ermita de San Sebastián y la Parroquia, donde a su llegada se oficia una Solemne Función religiosa en su Honor cantada por el Coro de la Hermandad. A su término, San Sebastián Mártir recorre la calle que lleva su nombre, la más céntrica de Alhaurín, para retornar a su Ermita entre la devoción de los alhaurinos.